¿Qué podemos contar sobre Machu Picchu que no se haya dicho ya? bueno, Machu es viejo y Picchu montaña, así que ya sabemos de donde viene la palabra machucha (jaja, chiste para unos pocos xD). A nosotros nos impresionó pero desde luego lo que más disfrutamos fue el camino hasta llegar a él. Son miles (literalmente) las agencias que te abordan por la calle en Cusco y la gran mayoría no son de fiar, por lo que te encuentras diferencias de precios abismales lo cual da mucho que pensar sobre el turismo responsable que se hace en esta ciudad.Llegamos a Cusco con la firme idea de hacer el camino por Salkantay, la ruta alternativa al camino del inca, más barata, más fría y más dura. Finalmente no nos dio confianza ninguna de las agencias así que decidimos montar nuestro propio camino inca a Machu Picchu.
Fue una excursión de 3 días que hicimos por nuestra cuenta acompañados por Franziska (una alemana que conocimos en Argentina y coincidimos de nuevo) y Mauricio (nuestro porteador chileno, jajaja, es coña, un amigo de Franziska que se unió a la aventura). Lo pasamos genial, la ruta es super bonita y la recomendamos 100% a todo el mundo que quiera hacerlo sin agencias, eso sí, mejor ir acompañado y formar un grupete.El primer día caminamos desde Santa María a Santa Teresa por un camino inca: vistas impresionantes, multitud de variedades de frutas a nuestro alrededor y muchas escaleras incas. Lo gracioso de este día era que al ser fácil perderse hasta encontrar la senda decidimos esperar en la placita del pueblo hasta que salieran los grupos que iban con guía y así seguirlos hasta que nos adentramos en el camino (más barato y más auténtico, jaja). La recompensa después de la caminata fue la llegada a unas termas en Santa Teresa, donde estuvimos hasta el anochecer.
El segundo día fue el más duro, realizamos una caminata de nueve horas desde Lucmabamba pasando por las ruinas de Llactapata, desde donde avistamos por primera vez Machu Picchu (qué subidón), y descendiendo hasta llegar a la famosa hidroeléctrica, lugar donde termina la carretera y comienza el recorrido de 3 horas junto a las vías del tren para llegar a Aguas Calientes.El tercer día fue la guinda del pastel, decidimos subir andando hasta Machu Picchu por unas interminables escaleras, que debido a nuestro cansancio del día anterior se convirtió en un auténtico infierno. Machu Picchu nos impresionó, pero era tal el cansancio que teníamos encima que creemos que no lo disfrutamos al 100%, pero qué maravilla! para nosotros las ruinas eran lo de menos, el paisaje es increíble siempre con el Huayna Picchu (montaña joven, junto a las ruinas) de protagonista.
En definitiva, visita obligada para quien esté por la zona pero si se tiene tiempo es totalmente recomendable caminar varios días y disfrutar de las maravillas que forman el valle sagrado.
Plaza de armas de Cusco
Cuy al horno (cobaya)
Estas semillas se usan como tinte
Al rico plátano
Una de papayas
Cafetales por doquier
Defendiendo su comida ante las gallinas
Malabares con maracuyá
Termas de Cocalmayo
Merecido descanso... lloviendo :)
Camino inca en busca de Llactapata
Primer avistamiento de Machu Picchu desde Llactapata
El equipo: Franziska, Mauricio y los mendas
Caminando sobre las vías... esto no es inca :P
Puente camino de Aguas calientes
Esto no sabemos lo que es xDDD
Embobada contemplando esta obra maestra
Quitando protagonismo
A la moda con su gorrito
Machu Picchu desde la puerta del sol (Intipunku) #15M12M
